«Torre vieja» de San Salvador

Epigrafía

La lápida conmemorativa de la construcción de la torre de Alfonso III fue constatada documentalmente por primera vez en el s. XII por el obispo Pelayo de Oviedo, acerca del cual es clásica su consideración de falsificador de documentos por parte de la historiografía, extremo este que, afortunadamente, está siendo sometido a crítica últimamente. Dicho prelado la situaba sobre la entrada principal de la fortaleza de Alfonso III, sin que quede suficientemente claro a cuál de ellas se refería: si a la de la Catedral, o a la, más alejada del objeto de la defensa, de la ciudad.

A partir de este testimonio documental sumadas las menciones cronísticas de época moderna y contemporánea, se ha generado un debate historiográfico acerca de la configuración de las fortificaciones del primitivo Oviedo, dentro del cual esta lápida ha tenido considerable protagonismo: generalmente se ha sostenido (Uría Ríu, 1967), que la misma se encontraba en algún lugar de la fortificación erigida por Alfonso III para defensa de la Catedral, como recinto de refuerzo ubicado al interior del recinto de la ciudad primitiva, eligiendo como ubicación concreta al de un supuesto muro cercano al lugar donde actualmente se ubica, en el muro testero N del brazo septentrional del crucero catedralicio. Sin embargo, César García de Castro (G. de Castro, 1995), ha dejado claro que su ubicación ha de encontrarse más cercana al objeto de la defensa, y al sujeto de la acción defensiva, que no es otro que la torre situada a inmediación del "Aula del Tesoro", esto es, la Cámara Santa de San Salvador.

Inscripción conmemorativa de la erección de la torre de defensa del aula del tesoro de San Salvador, como refuerzo de las defensas de la Catedral. Transcripción latina del texto de la lápida. Traducción del texto de la lápida.

La traducción del texto de la lápida es como sigue:

EN EL NOMBRE DEL SEÑOR DIOS Y SALVADOR NUESTRO JESUCRISTO, Y A LA GLORIA DE TODOS, DE LA GLORIOSA SANTA MARÍA VIRGEN, A LOS DOCE APÓS/TOLES Y RESTANTES SANTOS MÁRTIRES EN CUYO HONOR FUE EDIFICADO EL TEMPLO EN ESTE LUGAR LLAMADO OVETAO POR UN CIERTO RELIGIOSO PRÍNCIPE ALFONSO;/DE CUYA MUERTE HASTA AHORA SUCEDIÉNDOLE EN EL REINO EL CUARTO DE SU DESCENDENCIA, DE IGUAL NOMBRE,/EL PRÍNCIPE ALFONSO HIJO DEL REY ORDOÑO DE SANTA MEMORIA, MANDÓ EDIFICAR ESTA FORTIFICACIÓN CON LA ESPOSA SCEMENA, HABIÉNDOLES NACIDO DOS HIJOS, PARA QUE LA DEFENSA DE LA FORTIFICACIÓN/ DEL AULA DEL TESORO DE ESTA SANTA IGLESIA PERMANEZCA SIN DAÑO; PRECAVIENDO QUE NADA PEREZCA, PUES/ LOS GENTILES SUELEN APRESURARSE CON SU EJERCITO PIRATA NAVAL, DIOS NO LO QUIERA./ ESTA OBRA OFRECIDA POR NOSOTROS, SEA CONCEDIDA EN PERENNE POSESIÓN A LA MISMA IGLESIA.